Imponente conjunto arquitectónico integrado por la fusión de tres majestuosas casonas, las cuales datan de los siglos XVIII, XIX y XX. Tras los regios portones del hotel el visitante podrá encontrar una auténtica casa de huéspedes al estilo colonial. Pinturas que muestran el eclecticismo estético de nuestra ciudad, singulares piezas de cerámica y viajeros convertidos en estatuas de cobre, matizan la decoración de este parador. Su espacioso e iluminado vestíbulo rememora la cautivadora sala de una señorial casona habanera de los siglos XVIII y XIX, a la vez que ofrece el paso hacia un atractivo comedor para desayunar, bautizado como ""Catedral"", por la cercanía a la iglesia y plaza del mismo nombre. Cuenta también con dos patios interiores: ""La Arcada"" y ""La Yagruma"". El primero muestra un mural evocador de los arcos de fachadas y galerías de la ciudad y el segundo está destinado al sosiego y a la contemplación. Parte de las instalaciones son una recepción abierta 24 horas, caja fuerte, servicio de cambio de divisa, guardarropa, 2 cafeterías, un bar, servicio de habitaciones, un club infantil y con cargo extra, servicio de lavandería, aparcamiento y conexión a Internet. Ubicado en el mismísimo corazón del centro histórico, a sólo unos metros de la plaza de la Catedral, se encuentra el hotel, en la esquina de las calles Tejadillo y San Ignacio.